domingo, 3 de mayo de 2009

LOS GRANDES SEGUNDONES DE LA HISTORIA DE FERRARI

RELATO DE UN ESTÓMAGO AGRADECIDO

Si algo tiene que agradecer Ferrari a Michael Scumacher es la cultura de elección de segundo piloto que ha dejado en la scuderia. Una generación de estómagos agradecidos dispuestos a darlo todo por el equipo y convencidos de que el mundo es injusto con ellos. La excepción a esto puede ser Eddie Irvine, un espíritu rebelde, un vividor que corrió con dos cosas en mente: el dinero y las tías. Y a pesar de su filosofía de vida casi consigue ser Campeón del Mundo en 1999 después de que Schumacher se rompiese la pierna en Silverstone. Tuvo que echarse el equipo a la espalda y se lo echó(o se lo echaron). Eso demuestra que su elección como número dos fue la más acertada.

Los siguientes pilotos en ocupar el segundo asiento fueron Barrichello y Massa. El primero tuvo la mala suerte de coincidir con Michael en los gloriosos años en los que el alemán consiguió sus cinco títulos con los de rojo. Aun así demostró siempre una fidelidad digna de encomio. Claro que cualquier piloto de su nivel daría los dedos de una mano(eso sí, después de retirarse) para estar en su situación. Pasó buenos y malos momentos: Ferrari le dio la oportunidad de ganar carreras, pero también le pidió sacrificios que rozaron la humillación como Austria 2002. El problema es que, al contrario que Irvine, sólo se decidió a hablar una vez que abandonó el equipo. Por eso él duró tanto y Fast Eddie tan poco. Su frase más célebre: "Ahora voy a demostrar realmente quien soy sin la sombra de Michael". Pues aún estamos esperando, Rubens, este año es tu gran oportunidad

Massa es otro de los entrañables. Su esfuerzo por ganar el título en 2008 es digno de alabanza. Sus gestos en el podio de Interlagos son de lo más emocionante que se puede ver en F1. Y su lucha hasta el último metro(no olvidemos que no ganó el título por una curva) digna de la mejores hazañas. Las imágenes de Massa con la mano en el corazón y al borde de las lágrimas son inolvidables. Cuánta entrega. Cuando Kimi se dejó llevar por su dejadez innata allí estaba Massa para darlo todo. Si Kimi hubiese tenido la mitad del corazón que Felipe a estas alturas ya sería casi tricampeón. Sin embargo lo que le sobra a Massa(corazón y entrega) le falta a Raikkonen, y lo que le sobra a Raikkonen(talento) le falta a Massa. Una pena. Eso hubiese sido como mezclar la impresinante voz de David Coverdale en sus mejores años con la increíble técnica de Glenn Hughes. Pero no pudo ser. Aun así Massa se sobrepuso a un ridículo como el de Silverstone, a un regalo como el de Spa, a un repaso como el de Monza y a la impotencia de China para poner a Hamilton contra las cuerdas. Encomiable.

El título del blog(Un estómago agradecido) se refiere a la gratitud que deben sentir estos tres pilotos: por hacerlos multimillonarios, por permitirles ganar carreras(cuántos buenos pilotos pasan sin pena ni gloria por la F1 sin ganar ni una carrera) y por darles fama y reconocimiento a nivel mundial.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Señor Arce se le olvida el reverso tenebroso, lo que le pasó a Ivan Capelli, Alesi, y otros que fueron devoradas sus carreras por Ferreros roche feretros.
by Horus a proud pedazo de sabiondo metiche.

Pd:El analisis de Massa es bueno pero nos olvidamos que en pista tendría en frente a Fonzi (Alonso) don Limpio (Hamilton) y el golden boy (Vettel).
Muchos gallos en el gallinero ve este modesto halcón.

Anónimo dijo...

Ahh y las fotos geniales.
3 puntos colega.
by Horus a proud chicho terremoto.
pd: CAMY ES UN MARUJO.

J. ARCE dijo...

Lo de Capelli merece otro capítulo, igual que la eterna espera de Patresse por una prometida llamada para unirse a los de Maranello. Alesi cometió el error de su vida al rechazar a Williams y fichar por Ferrari pero, ¿quién iba a saber que Williams se convertiría en el dominador de la F1?

Il Venturetto dijo...

Jose, ya sabes que el año pasado te metiste con Massa y casi acabas flagelado... :-P